lunes, 27 de mayo de 2019

¡A los psicópatas y narcisistas no les gusta!

Les contaré de mi experiencia con los psicópatas y los narcisistas y de cómo usan el pensamiento positivo para engañar a la gente. 

El pensamiento positivo, inserto en un discurso irracional, crea sesgos cognitivos y subestima la posibilidad de los eventos que puedan ocurrir en realidad. No es lo peor que puede pasar que contribuya al pensamiento mágico, eso es apenas la punta del iceberg. 

El pensamiento positivo que usan los psicópatas y narcisistas muchas relaciona lo que tú sientes con lo que eres como persona. Usan muchos juicios personales para acabar con tu seguridad y atacar con creencias. 

Cuando tienen un discurso irracional usan este tipo de creencias nocivas y manipuladoras: 

- Cosas que son imposibles que sucedan. Mentiras sobre posibilidades que pocos podrían lograr. La mayoría de las historias del psicópata son ficticias o no son tan espectaculares. 

- La alegría maníaca. Mientras que la tristeza ayuda a encontrar información que propicia nuestro desarrollo emocional. Algunos de estos psicópatas y narcisistas fingen esa alegría, fingen ser genuinos y que te comprenden. Pocas veces es bueno hablar de sentimientos o tener una retroalimentación con ellos. 

- Pocas o nula compasión: No es casualidad que tengan esos discursos en donde uno no puede fallar o no pueda tenerse piedad, en donde sólo seamos duros con nosotros mismos porque no podemos ser positivos en cada momento. Algunas veces lo hacen porque la gente tiende a culparse de que las cosas no vayan bien en la empresa que se propongan. 

- Subestimar posibilidades. Imaginemos un escenario en donde no hay oportunidades ni ventaja ni gente con la cual conectar ¿sería posible que nos fuera mejor? ¿es posible que tengamos una actitud positiva? Yo no lo creo, francamente es una actitud que raya más que la locura, en la crueldad y en la psicopatía. 

- Manipulación. Al esforzarnos por aparentar que no pasa nada, tomamos las decisiones equivocadas. 

Experiencias con psicópatas, todas increíbles

A mí, el psicópata Elizondo me decía que estaba en mi zona de confort, que no quería eso, pero, sorprendentemente, todos sus lamesuelas y amantes estaban en su zona de confort, no trabajaban y además saboteaban las oportunidades de desarrollo de gente, que como yo, que sí promovía y vendía, aún con circunstancias adversas. 

Otro psicópata llamado Luis Sordo, el de los Osos Fredo, siempre detestaba la bondad y la amabilidad de las personas, pero esas personas (y el aprovecharse de ellas) era lo que mantenían sus deficientes y mediocres productos a flote. Sus monos voladores (su sobrina y demás sirvientes) eran igual de mediocres, pero ellos no subestimaban que eran una mierda de personas y vivían bien con ellos. 

Muchos narcisistas usan una falsa meritocracia para creer que si tu vida es miserable es sólo tu culpa, creen que tú lo atraes porque eres negativo. Pero cuando ellos se equivocan, les reclaman o actúan de mala fe, se revictimizan, te hacen ver como un loco o como un irracional. 

Gente servil y con rasgos narcisistas insiste en el pensamiento positivo para solucionar problemas que requieren tratamientos complejos o que nos ayudan a observar la injusticia y falta de empatía del mundo. 

Cuando te empieza a ir bien y la vida parece ser más amable contigo, los narcisistas no lo soportan y los psicópatas fingen ser indiferentes pero en el fondo los pudre por dentro. 

Sin embargo, esos psicópatas envidiaban profundamente la bondad, el imán y los recursos de gente que no es tan grandiosa como ellos se ven, esto es porque lo genuino y lo que sale de la virtud de la gente es como ácido para ellos. Es figurado, porque echarle ácido a esa gente sería como cumplir el sueño americano. 

Esta gente nunca tiene ni tendrá límites, así que no intente razonar con ellos y ¡HUYA! 




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