jueves, 5 de junio de 2014

Canciones con filosofía: Superídolo

Digamos que es algo que no puedo dejar de pensar, que es alguien que me ha conquistado. Un nuevo artista que hace que todo lo racional en mi cabeza, por un largo tiempo, no importe. 

Su majestad imperial Silverio: por él compraré vinilos y su libro Esclavo (ya sé en dónde lo venden). Iré a los conciertos que pueda y entenderé, con su música, un nuevo sentido de la vida. 

Esta canción se la dedicó a él mismo. Nada le bastó para que él se considerara una superestrella, nada necesitó, como seguramente nada necesitará. Como todo buen filósofo no siempre es fácil de entender y las objeciones a su obra sólo lo hacen más fuerte. 

De mi pasión por él volví a reseñar, a salir de mi ostracismo, porque él es una proyección de lo que me callo, de lo que muchas veces las personas no han visto de mí. Quisiera imitar su modelo, pero creo que sólo lo adaptaré con agrado. 

Porque una personalidad fuerte, domina a la débil. Su majestad imperial Silverio, el amo del misterio. Aquí una más de sus súbditas.





Por cierto, cuando logre tocar en la guitarra ese riff, pues con gusto me iré al infierno. 

Se lo lavan, como diría su majestad.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario