sábado, 21 de marzo de 2020

Canciones con filosofía: Adia

Sarah McLachlan se hizo famosa por la canción Angel, tema principal de City of Angels, una dulce canción que habla sobre estar enamorado y en paz. 

También tiene canciones con siginificados ambiguos como Possession, es la voz en inglés de Jessie la Vaquerita en la canción When she loved me. Y su canción I will remember you sale en Los Simpsons cuando Lisa y Bart creen que mataron accidentalmente a Martin. El club audiovisual hace una semblanza de la vida del ñoño y se oye de fondo esta canción. 

Pero hay una canción que no soporto, que me incomoda y que hace que la deteste y a la que van dedicadas estas líneas. 

Adia es una canción de disculpa, si se le puede llamar así. McLachlan se enamoró de la ex pareja de su mejor amiga Adia y compuso este tema para tratar con su dolor y el sentimiento de "sentirse responsable de todo"

McLachlan dice que se sintió muy mal, pero que se enamoró porque: estaba destinado a ser. Dejó de hablar con su mejor amiga al sentir que la traicionaba. Pero pues, ella tomó su decisión

Y es obvio: ¿qué no hay más hombres? ¿qué no sabes que está herida y que no puede defenderse? ¿Alguien pensó en Adia? ¿Alguien se habrá puesto a pensar en su dolor? ¿Sarah extrañará a Adia? 

¿Ellos me extrañarán a mi? 

Pienso en ello cada cuando: mis mejores amigos se fueron y eso me rompe el corazón. Y me torturo pensando en si me extrañan, si alguna vez me quisieron, si yo era un peso muerto y sólo querían olvidarse de mí. El qué hubiera pasado si... nuestra amistad hubiera durado para siempre. 

Pienso en Sarah cuando le escribía esta canción a su amiga: todas las racionalizaciones que tuvo qué hacer para disminuir el daño; todo lo que tuvo que decir para tratar de salvarse; todo las justificaciones que se tuvo que inventar, todo lo que tuvo qué hacer como que reconocía y la ambiguedad de su discurso basura... 

Adia no le importaba después de todo. Y, siempre que piensen que sus amigos los traicionaron, piensen en la mustia de McLachlan. 

Sobra decir que esta canción duele, porque cuando la cantaba tenía una distancia emocional, pero ahora veo, que yo soy Adia y todo es peor ahora. 

Antes de que los bloqueara de mi vida y se fueran para siempre, fue ese mismo discurso el que me aplicaron: todo lo que reconocían de mi, la torre de la que bajaban, cómo, de alguna manera, ellos no eran responsables... cómo trataron, sin éxito, de reconfortarme y toda esa basura. 

Sí, lo había perdido todo... pero eso me dolió en el alma. 

De repente, mis sueños se habían convertido en el peor de los futuros posibles: todos eran pedazos de un sueño roto. Todo se sentía como el fin. No quería aceptarlo, pero no lo pudimos lograr. 

Es el que dice los discursos más amorosos el que no está enamorado. Ellos me bajaron de mi torre, reconocieron mi belleza... Pero no son inocentes, de ninguna manera los perdono. 

Y, si esa canción la escuchan como Adia, por favor, no justifiquen. No pueden cambiar la forma en que nos sentimos. No son inocentes. En esa canción se puede escuchar el sonido de un corazón rompiéndose. 

Tal vez ustedes sean una Adia, de las miles que hay, pero no lo saben. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario