domingo, 3 de mayo de 2020

No soy una víctima

Mi ex amigo me lo dijo: ...o entonces es que te gusta hacerte la víctima. Y en parte, creí que tenía razón. Tal vez me acostumbré a ser miserable, pero mira ex amigo, yo espero que no te pase. 

Y no me justifico, sin embargo, voy a describirte mi experiencia. 

Dices que yo me peleaba con mi tía: y tienes razón. Ella y yo siempre hicimos lo que quisimos y eso nos ponía en jaque muchas veces. Cierto día nos peleamos tan fuerte que ella quería salirse... pero yo le pedí disculpas. 

También ella hacía que mamá y yo peleáramos... pero no fue triangulando ni nada. A veces teníamos mal modo y si, muchas veces fui cruel con ella. Me calmé, pero la verdad si me encabrona pensar en eso.

Por eso quiero que tengas en consideración estas cosas:  

Te deseo, ya que eres un hombre y no un niño como tú crees, te deseo que no sientas eso: es como si te rasgaran el estómago y te pusieran un casco que sólo reproduce estos recuerdos. 

Ojalá nunca te sientas indefenso, que se te viene el mundo encima a los 26 años y que la gente no te crea. Ojalá nunca tengas depresión ni quieras dejar de salir de tu casa, de asearte y de seguir adelante. La desesperación es no poder morir aunque se quiera. 

Cuando murió mi papá fue como si todo pasara muy rápido: un día lo acompañé a la farmacia París y sólo se cayó, al otro día era estar en un hospital haciendo guardia. Al otro fue tomar un coche: para que nos llevara al panteón a esperar la cremación.

Y un día mi tía se enfermó y otro fue ir al hospital porque ya no podía más... otro día fue que mejoró, pero sólo porque se pondría peor. Al otro fue tomar un coche: para que nos llevara al panteón a esperar la cremación. 

Y si, me estoy haciendo vieja y amargada: créeme que esa es la peor sensación que he sentido. Se siente de la chingada: es como dos putazos en uno, porque el pinche tiempo se pasa más rápido. 

Sientes que la vida no es justa y que quieres desaparecer. Luego te das cuenta de que se han ido, de que ya no puedes hacer nada con ellos. 

Ojalá nadie te venda que no hay consecuencias, porque me causaste un gran dolor porque no me apoyaste. Crees tener la razón y crees que la gente sufre porque quiere. Crees en ridiculeces como el hecho de ayudar a morir a alguien. 

Yo, una filósofa que siempre habló del suicidio, que siempre defendió la eutanasia, que desprecia la vida... Yo no vi el dolor que conllevaba perder a un ser querido. Porque los creía eternos... algo de mi fue tan estúpido que creía que durarían para siempre. 

Como tu amistad. 

Pensaba que iba a poder soportarlo, pero la verdad es que no... ahí supe que mi vida era un fracaso... que la gente no iba a tener piedad y que yo estaba sola. Porque nunca sentí tu apoyo. Ni de las otras tres. 

Sólo usaron mi tragedia para hacerme creer que me comprendían, que todo estaría bien y no fue así. Ojalá nunca te sientas decepcionado de tus amigos. Nunca sientas que te mintieron y que te rompieron el corazón, nunca sientas que ellos son más felices sin ti mientras lloras. 

Ojalá nunca sientas que no mereces existir. Sigue siendo un hijo único del mundo. Muchas veces me hiciste la broma de que lo creías, pero tú lo vives. No es necesario que dejes de fingir. 

Ojalá y no pierdas nada, que te den todo: que nunca salgas de esa burbuja que te has creado. Ojalá nunca sientas lo que yo, no porque no te lo merezcas o porque seas inmune, sino porque no puedes. 

Ojalá nadie te haga creer que es tu amigo, o te haga sentir que no estás solo para luego descartarte en tu peor momento... Ojalá y no pase: que tus padres, que tu familia, sea eterna y que todos los momentos, buenos o malos, no los extrañes, ni los lamentes ni los tomes con ambivalencia. 

Quédate con las falsas amistades, o alguien que te haga creer que te quiere. Ya eres un hombre y supongo que tus creencias son más valiosas que las razones y los hechos. Ojalá nunca sufras ni despiertes de tu sueño dogmático, tu eres la medida de tu mundo. 

Porque yo seguiré siendo una víctima después de todo, alguien que de seguro, no puede decirte nada. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario