domingo, 28 de enero de 2018

He borrado entradas

Se que una vez que subes las cosas a la red, ya no se bajan, ciertamente me avergüenzo de lo que he escrito... He borrado ideas de cuando no tengo razón, de expectativas que no se cumplieron, de cuando creía cosas que resultaron ser falsas, malas reseñas... cosas que ya no me gustan y que quiero olvidar. 

A veces olvido escribir pensando que nadie me va a leer. Y resulta ser que me han leído y han buscado fragmentos para usarlos en mi contra. O bien, resulta que no le desagrado a la gente, pero es muy complejo y muy satisfactorio a la vez. 

Ahora bien, créanlo o no, hay veces en que pienso que van a funcionar las secciones y otras en que no se sostienen. Otras quiero meter mucha información en los post... vaya, siempre es una friega editar. 

Otras veces sale tan bien un post, que quisiera que fuera una racha, pero se que no se puede y se que es un continuo ensayo y error. 

También, he olvidado que un blog no siempre tiene que ver con la vida de las personas, a veces uno escribe o habla sobre lo que conoce o ve. Sus "sesudas" reflexiones, sus lugares comunes... tantos ríos de tinta electrónica que creemos que cambiarán el rumbo de quienes nos lean. Y no, rara vez es así. 

Olvidó que es un blog de divulgación... lo hice porque había pocos libros de filosofía, además de que una gran mayoría cree que los filósofos no tienen nada que decir. A veces pido que no sea cierto. 

Ojalá tuviera mejores noticias, me falta una buena metodología y diseño. Mi estilo es sencillo, demasiado. Mi vida no es el blog, pero quisiera poder hacer más. 

Pocas veces digo que es un blog terapéutico, cuando escribo me siento mejor, pero a veces prefiero llevar una meditación filosófica y tirarla a la basura, darme cuenta qué es lo que no funciona y por qué. 

He visto otras porquerías y leído blogs terribles... en contenido, en discurso inconsciente y en diseño. A veces, no me siento tan mal, se que tengo esperanza. 

Pero... cuando veo que todo lo demás no funciona, prefiero borrarlo todo. Hay miles de entradas, horas del día y ríos de tinta electrónica, para corregirlo todo y empezar de nuevo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario